El Coleccionismo de Slot
Tradicionalmente se asocia el concepto de Coleccionista de Slot a aquel aficionado que posee una extensa colección de modelos a escala de un determinado fabricante de coches para pistas eléctricas
y que además se preocupa de mantenerla buscando completarla lo máximo posible. Y así es para muchos de aquellos privilegiados aficionados que desde hace décadas, y no exagero, comenzaron a guardar sus preciados coches de slot en un concepto que une el valor de la antigüedad con el de la inversión en bienes tangibles (todo bien de naturaleza material susceptible de ser percibido por los sentidos).
Pero aunque respeto enormemente a los colegas de hobby que siguen ese criterio de coleccionismo, realmente todos son aficionados a los slots, soy de los que piensan que es más apasionante realizar un coleccionismo selectivo presentado desde el punto de vista del aficionado al automovilismo deportivo en cualquier de sus expresiones y que desea disfrutar de la historia del mismo reflejándolo en sus modelos a escala. Contrariamente al concepto del “Yo más”, un criterio de coleccionismo basado únicamente en la cantidad ya sea por unidades o valor económico (y repito, perfectamente respetable), he tenido la suerte de ver, disfrutar y por supuesto valorar algunas pequeñas colecciones de colegas que se me han antojado maravillosas por lo que suponen de valor histórico al situar los modelos a escala en un lugar y una época perfectamente delimitada. Y nunca eran superiores a las quince unidades.
Y es que en cualquier caso, creo que la clave para considerarse Coleccionista de Slot no es otra que la de tener un criterio para coleccionar, es decir, tener definidos tus gustos, preferencias y poder adquisitivo con los que poder completar una serie de modelos a escala que satisfagan tu pasión por los coches deportivos, siempre con conocimiento de la colección y nunca como inversión. Si lo tienes bien definido, si comprendes lo que implica de selección y no de abarcarlo todo, el Coleccionismo de Slot te gustará. Porque no es tanto un problema de limitación como de definición.
Pero cuidado, limitaciones las hay y creo que debemos ser conscientes de las dos principales: el espacio y el dinero.
El espacio entendido como tal, es decir, un lugar donde poder guardar y mirar adecuadamente tu preciada colección. Para muchos no es fácil conseguirlo pero coleccionar coches de slot para tenerlos en cajas y cajas guardadas en un frio trastero o armario en donde no puedas compartirla con los amigos o las visitas, donde no puedas hablar de ella contando su historia, se me antoja un pérdida de valor importante para el concepto de coleccionismo que defiendo y me gusta.
Y la limitación por vía del dinero es obvia. Debes ser consciente de tu capacidad adquisitiva al plantearte el coleccionismo de slot, de lo que estás dispuesto a gastar periódicamente para satisfacer tu pasión. Afortunadamente, las posibilidades van desde el gran consumo y distribución con fácil acceso para cualquier aficionado que quiera coleccionar, hasta las ediciones muy limitadas difíciles de encontrar y al alcance de unos pocos pudientes. En este sentido, me gusta y aconsejo no perder la cabeza, estudiar bien el mercado, no creer que por qué de un determinado modelo hay pocas unidades debemos conseguirlo cueste lo que cueste, el reflexionar con la capacidad de producción de algunos fabricantes que saturan los comercios con nuevos y muy caros modelos en plazos de tiempo excesivamente cortos para nuestros bolsillos, en no obsesionarse nunca por no haber podido comprar una determinada réplica, etc.
¿Y qué coleccionar?. Las posibilidades son infinitas. Al definir tu criterio puedes basarte en variables como la escala (1:32, 1:24, 1:28, etc.), las marcas de coches o escuderías (Ferrari, Porsche, Mercedes, etc.), los tipos de coche (Grupo B Rallye, F1, Endurance LMP, etc.), las épocas (Años 50, Clásicos, LeMans 80´s, etc.), los pilotos (Senna, Sainz, Vatanen, etc.) o las nacionalidades. Hay muchas más, cualquiera es válida si a ti te satisface. Probablemente buscarás un concepto que te sea cercano o que te recuerde experiencias vividas, ya sea porque competiste con ellos o porqué tuviste el privilegio de verlos correr en los circuitos/tramos reales.
Para terminar comentaré que personalmente pienso que cuando hablamos de Slot creo que existen más aficionados coleccionistas que competidores. Es decir, las carreras de slot se nutren de una minoría de aficionados al hobby cuya pasión es compartir su afición disputando con otros colegas un buena competición de pista o de rallye pero que, contrariamente a lo que sería la expresión natural del hobby, son mayoría los que expresan su pasión por esta afición coleccionando slots y que sólo de vez en cuando se atreven a disfrutar de los coches dando unas pocas vueltas a su sencillo circuito doméstico. O incluso ni eso. Tanto para unos como para otros, el Slot es su hobby, y sinceramente creo que todos ellos son necesarios para mantener con buena salud esta extraordinaria afición.
